Con 1,48 metros de estatura, Javiera Grez posee un interesante juego aéreo, tal como lo demostró en un compromiso amistoso de la selección chilena femenina frente a Sudáfrica, jugado el año pasado.

“Tiene un buen rechazo y en los entrenamientos realiza muchos ejercicios de sentadillas y pesas, el cual le da muchas fuerzas en las piernas para tener ese salto”, explica Patricio Gutiérrez, entrenador del primer equipo femenino de Curicó Unido.

Desde los 3 años que juega al fútbol y a los 13 comenzó su carrera en el equipo de la Región del Maule, logrando ese mismo año el título nacional en la serie sub 17. En la actualidad sigue en la escuadra del Maule, participando regularmente en los procesos de las selecciones nacionales, tanto en adultas como en juveniles.

El hecho que en sus inicios tuviera que jugar con varones le forjó un carácter que le ha permitido llegar muy lejos, tanto en el elenco de la “Banda Sangre” como en La Roja Femenina. “Tiene personalidad, es atrevida, siempre tiene en mente el arco contrario”, indica Gutiérrez. Además destaca el compromiso y su responsabilidad al momento de prepararse para la competencia, especialmente en las prácticas. “Le gusta llegar una hora antes a los entrenamientos. En ese sentido es profesional porque le gusta entrenar”, confiesa el entrenador.

Grez fue parte del plantel que estuvo en la Copa América Femenina 2018, disputado en La Serena y a sus 18 años tiene potencial para seguir avanzando en su carrera y dejar más huella en la Región del Maule. “Creo que el hecho de jugar un Mundial será un aporte para el desarrollo del Campeonato Nacional en nuestro país”, destaca la jugadora.

Fotografía: Sergio Coilla/Comunicaciones Curicó Unido