Corría el minuto 96 en el Municipal de La Pintana y Diego Fernández ganó en juego aéreo para sentenciar el 2-2 entre Real San Joaquín y San Antonio Unido por la fecha 3 de la Segunda Grupo TX. Lo anecdótico fue que el autor del empate en el último minuto fue concretado de cabeza por el arquero de los “Chicos Buenos”, quien además realizó su debut con su escuadra este fin de semana.

Un estreno soñado para el guardameta de 32 años, quien vive su revancha en el profesionalismo. “Llegué cuando el campeonato ya había comenzado, recién me inscribieron para estar habilitado en la segunda fecha. He tratado de acoplarme al equipo sabiendo que está comenzando en el fútbol profesional. Tuve una lesión muy larga, llevó un año tres meses sin jugar, así que muy agradecido con el equipo de volver, porque confío en mí”, destacó.

Además, “Figue” mencionó su principal misión en su llegada al club, donde se sintió cómodo con su regreso tras más de un año sin jugar al fútbol. “Se me dio la oportunidad de entrar y jugar, aportar al equipo con mi experiencia principalmente en la categoría. El profe tiene claro su sistema de juego, siempre juega con 3-5-2, uno tiene que tratar de acomodarse a eso. Hay momentos dónde te van a llegar por todos lados, pero también hay otros, donde vas a incomodar al rival”, reflexionó.

El “1” del Real analizó la jugada que catapultó la agónica igualdad en el sector sur de la capital. “Hicimos todo el desgaste en el partido. Se genera un córner donde yo inmediatamente ví la banca y así fui a buscar esa jugada. Se origina un segundo córner, ahí para mí fue maravilloso el centro que sacó el flaco y veo que me está marcando un rival más pequeño, así que le gané la posición para poder anotar. Creo que fue un golpe anímico importante, sí bien éramos locales, se empató en el último minuto”, recordó.



Su camino en el fútbol profesional

Dio sus primeros pasos en Valparaíso, siendo parte de las divisiones inferiores del Decano, donde recuerda a sus mentores para desarrollarse como portero. “Me formé con los mejores en la parte técnica, con un gran preparador de arqueros como es Juanito Olivares y mi otro profesor de arqueros que le guardo mucho cariño, Ruperto Rojas. Sí bien no sé me dio la oportunidad de jugar, salí a préstamo para tener la posibilidad y dónde hice mi carrera prácticamente”.

No obstante, su nivel mostrado en las inferiores del club porteño le dio la oportunidad de ser parte de la Selección Chilena Sub-17 que viajó a Ecuador en 2007. “Tuve la oportunidad de viajar con la selección dirigida por José Sulantay. Lamentablemente, tuve una lesión en el tobillo que no me permitió jugar y estuve en la banca ese torneo. Fue una linda experiencia estar en la selección chilena, poder cantar el himno nacional. No hay nada más lindo que poder representar a tu país”, sostuvo.

El sur fue el escenario principal para el desarrollo de Diego Figueroa como futbolista, lugar donde realizó su debut en Provincial Osorno en 2008 y logró buenas campañas con Deportes Valdivia. En el Torreón, el arquero fue titular indiscutido en el Ascenso 2018, certamen que jugó en su totalidad (32 compromisos) y donde estuvieron a un paso de subir de categoría, quedando fuera ante Santiago Wanderers en cuartos de final del torneo.

“Una vuelta bastante larga, pero que la he disfrutado. En 2018, fue el mejor año con Valdivia, incluso hubo clubes de primera división que me quisieron, pero tomé la determinación de quedarme, porque quería jugar. Esto tiene altos y bajos, muchos me daban por retirado, pero fui constante. Esta vuelta es para mi hijo, porque se la había prometido, gracias a Dios me pudo ver ayer en la tele y vio que su padre le dio vuelta la mano al destino”, se sinceró el meta que también jugó en Deportes Temuco, Malleco Unido y San Antonio Unido.

Revancha: sus metas con Real San Joaquín



Luego de dos graves lesiones, Diego vive su renacer en la actividad, donde espera entregar su experiencia al equipo esta temporada 2022. “Siempre vamos a querer pelear lo más alto posible, es una categoría que conozco mucho y que sé que no hay equipos grandes, el nivel es muy parejo. Hay equipos con mayor nombre, como Valdivia, Lautaro de Buin o San Marcos de Arica, pero nuestro compromiso es estar peleando siempre arriba. La clave es jugar partido a partido”, analizó.

Su tarea individualmente la tiene clara, algo que espera conseguir este año con Real San Joaquín en la Segunda Grupo TX. “Quiero retomar mi nivel, este es mi primer partido después de mucho tiempo sin jugar. Prepararme mejor físicamente, aportar con mi experiencia. Hacer un gol fue una cosa esporádica, porque mi trabajo no es ese, tengo que atajar y mantener al equipo ordenado. Vamos a trabajar para meter al equipo lo más alto posible, pelear un ascenso que sería más que histórico para el club”, sentenció el guardián de RSJ.

Fotografías: Lisandra Jung/Campeonatochileno.cl